1. Me enfermé. Y si bien sufrí de uno de los peores síntomas del A(H1N1), no enfermé de influenza, aunque sí provoqué la paranoia de varios, sobre todo la de mis familiares. Pero no, señores, no. Lo mío, este fin de semana, fueron días de ranitidina y melox. Y de reposo, hasta donde se pudo. Y de fiesta: fuimos a una boda. La boda de mi hermana.2. De la celebración mentada procede la foto que ilustra esta entrada, en la que se muestra el uso de un cubre bocas alternativo, que además hace las veces de ventilador. Trascendió que el hombre que lo porta --y que lleva, además, cubre ojos traslúcidos-- bailó al son de Calle 13 y Poison en la pista. Y estamos hablando de un hombre misterioso, al que pocos han visto retratado y, menos aún, bailar. Trascendió, digo.
14 comentarios:
Creo que las cosas están muy, muy, mal.
Parece que están mal, sí, muy mal. Eso le escuché decir a la señora Gillette.
Qué susto. Dime quién te la pasó para no acercarme.
Oye y, ¿Poison se baila con abanico?
Un saludo.
En esta época, amigo mío, ¿qué no se baila con abanico? Salud.
Pues sí. Habrá que sacar El baile del cubreboca ya. D.
En este país Simpsoniano, la gripe del político dejó de existir después de que el precio de la carne porcina se fue por los suelos.
Quizá Locomía sí se baile con abanico.
Nicole dice: "Soy una leyenda, un mito"
Qué buena noticia que t encuentres mejor...
Un abrazo cibernértico para que no me vayas a contagiar jejeje..
saludos,
tu amigo isaac
Al ver la foto que pones del "hombre misterioso" que conoces recordé inmediatamente lo que hace poco Aurelio A. le respondió a Luigi A. en un post a propósito del uso de los cubre-bocas: "es elegante desde chico: mata el virus a golpes de abanico". jajaja. Parece que también es el caso de tu amigo porque elegante sin duda se ve.
p.s. qué bueno que no fue influenza, pero por si acaso tengan a la mano unos abanicos.
Así es, mi amigo misterioso es muy elegante, Monse. Y en México, hoy, lo que siempre hay que tener a la mano es tanto un abanico como una pistola: regresa el PRI, regresa...
Hombre! a la última boda que fui bailé el son de la Iguana, coreografía de ningún tipo de complejidad (arrastrarse por el suelo como el reptil en mención), mas para la cual se requiere de óptima condición física. Yo no sé bailar y tampoco tengo una gran condición física, pero el whisky me dio el brío suficiente para hacerlo, lo juro, sólo por minuto y medio. Dos semanas me duró el dolor de espalda y brazos. ¡Ay, las bodas, qué chingonas son mientras no sea la nuestra! Abanico, Calle 13, Poison, qué más hubo que no nos quiere compartir. Saludo
Me imagino el Baile del Cubreboca recuerda el baile del antifaz de John Travolta en Pulp Fiction. El bailador se pasa lentamente la mano por la boca. Repetir con la otra mano y volver al principio. Creo que los dos bailes, el del Cubrebocas y el del Antifaz, se pueden practicar al mismo tiempo, aunque dudo que un bailador no muy hábil pueda practicarlos mientras realiza el Baile de la Iguana.
nico samuray o geicha?
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